La Investigación Documental: Características y Algunas Herramientas

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Introducción


La investigación documental resulta importante desde el punto de vista de la formación del estudiante, ya que es fundamental la construcción del conocimiento dentro de un proceso mayor de investigación y, por supuesto, de ordenamiento de ideas. La investigación documental implica complejidades que requieren ser abordadas con claridad; no hacerlo, repercute en los resultados de la investigación.

En este tema se abordarán diversos retos que implica la investigación documental actualmente, como la búsqueda en Internet y el acceso a bibliotecas y repositorios digitales; así como estrategias de búsqueda, formas de citación, fuentes diversas y abordajes eficientes al acceso de distinta información. ¡Te invitamos a seguir leyendo!



Computadora, libros, celular y notas.

(s. a.) (2012). La investigación documental [fotografía]. Tomada de https://pixabay.com/es/port%C3%A1til-lugar-de-trabajo-escritorio-336634/

Identificar las fuentes documentales y las estrategias de la investigación documental, a partir del pensamiento crítico y la dimensión ética en su proceso de aprendizaje, para el desarrollo de escritos académicos.

¿Qué es la investigación documental?


Antes de todo, debemos aclarar a qué nos referiremos cuando hablamos de investigación documental. Pues bien, investigar se refiere a la obtención (y construcción) de conocimiento; se puede investigar desde muy diferentes perspectivas, con diferentes objetivos, o teniendo en cuenta distintos tipos de datos, procedimientos o métodos para obtenerlos. De tal suerte, existen muchos y diversos criterios de clasificación de la investigación.

Las clasificaciones más comunes la dividen en tres tipos de investigación, por los medios en que se obtiene la información: investigación de campo, experimental y documental; aunque hay autores que reconocen sólo dos: la documental y la de campo. Sea como fuere, debemos tener claro que los enfoques clasificatorios son múltiples y nunca definitivos.


Esquema con los tipos de investigación por los medios de información

Tipos de investigación por los medios en que se obtiene la información

La investigación documental


La investigación documental es, como su nombre indica, aquélla que se realiza a partir de la información hallada en documentos de cualquier especie, como fuentes bibliográficas, hemerográficas o archivísticas.

Ahora bien, también trabajarás con las fuentes digitales, de las que se hablará más adelante. Por otra parte, cabe destacar que lo que se pretende con esta aproximación es, en palabras de Páez (2006), “asegurar a los estudiantes [...] condiciones para obtener la información para desarrollar las acciones que permitirán la búsqueda del conocimiento” (p. 255). Es un hecho que la investigación es parte fundamental en la construcción del conocimiento, de modo tal que deberá ser un proceso cuidadoso, ya que ordena las ideas y las centra en objetivos específicos.

Esquema con la clasificación de la investigación documental por sus fuentes de información

Investigación documental a partir de diversas fuentes de información



A continuación, profundizarás en esta idea, a partir de las aproximaciones conceptuales de investigadores de diversas disciplinas.


Baena (1985) indica que “la investigación documental es una técnica que consiste en la selección y recopilación de información por medio de la lectura y crítica de documentos y materiales bibliográficos” (p. 72).

Garza (1988), quien es más específico, dice que la investigación documental “se caracteriza por el empleo predominante de registros gráficos y sonoros como fuentes de información [...] registros en forma de manuscritos e impresos” (p. 8).

La opinión de Rojas (2011) es mucho más amplia; se adapta mejor a las formas de investigación de hoy día, y coincide mejor con el enfoque buscado para el tema: “En general, las fuentes de información utilizadas en la investigación se denominan, genéricamente, unidades conservatorias de información, y se trata de personas, instituciones, documentos, cosas, bibliografías, publicaciones, estados del arte, estados del conocimiento, tesis, bases de datos, fuentes electrónicas situadas en la Web, etcétera, cuya función es la de almacenar o contener información” (p. 281). Así, esta definición abona a la perspectiva con que se abordará la investigación documental y da pie a profundizar en explicaciones respecto a las fuentes, mismas que destacaremos y enlistaremos más adelante.

Por otro lado, Ávila (2006) comenta que “la investigación documental es una técnica que permite obtener documentos nuevos en los que es posible describir, explicar, analizar, comparar, criticar entre otras actividades intelectuales, un tema o asunto, mediante el análisis de fuentes de información” (p. 50). Esto deja claro que investigar no es sólo “copiar y pegar”, sino que requiere una serie de operaciones mentales lógicas y críticas, cuya finalidad última será la construcción de conocimiento, como ya decíamos líneas arriba; por lo tanto, requerirá tener objetivos precisos y un orden claro, pues forma parte de un proceso mayor de investigación.

El proceso de investigación


Se recomienda ser sumamente ordenado en todo proceso de investigación, para lo cual, se propone una lista mínima y secuencial de actividades participantes en el proceso (misma que puede ser ampliada o modificada por el investigador con cierta experiencia):

Esquema con el proceso de investigación

Proceso de investigación

Ahora bien, cada paso requerirá de la aplicación de diversas técnicas o estrategias para su adecuada ejecución; por ejemplo: la localización y fijación de datos trascendentes, el análisis de documentos y contenidos, la pertinencia de las fuentes, el conocer los repositorios o ubicación de las fuentes (físicas o digitales), diferenciar entre investigación bibliográfica e investigación documental, etcétera.

Recopilación de información


Para la investigación documental, el registro de la información obtenida es de suma importancia; pero, antes de ello, y de acuerdo con la lista que se te proporcionó, es importante que la revisión de la bibliografía sea selectiva; es decir, que esté enfocada en detectar y obtener información útil al objetivo de estudio, considerando que sean las más pertinentes, importantes y recientes.

Una vez que se identifiquen las fuentes, se deben localizar físicamente y se recomienda organizar el material en fichas de trabajo. Es primordial recordar que el acopio de material se realiza cuando el plan de trabajo está determinado y que, posterior a ello, se requiere recopilar los datos bibliográficos (o hemerográficos), así como recopilar los contenidos, de acuerdo con nuestro esquema de trabajo.

Existen varias técnicas para registrar el material bibliográfico; el más difundido son las llamadas fichas bibliográficas, realizadas comúnmente en tarjetas de cartón o cartulina de 7.5 x 12.5 centímetros, en las que se anotan los datos editoriales de la fuente; a saber y de manera general: nombre del autor, título (subrayado), número de edición, traductor (si aplica), ciudad donde se imprimió el libro, nombre de la editorial, año de la edición y número de páginas.

Lo fundamental es que tengas organizada tu información bibliográfica, no importa si lo haces en una ficha, en una bitácora o en alguna otra forma que te funcione y te haga llevar un orden.

Existen también otros recursos, de acuerdo con la fuente de información con que estés trabajando:


Esquema con los tipos de fichas de trabajo

Tipos de fichas de trabajo


En todos estos casos, es pertinente anotar toda la información necesaria para poder ubicar la fuente y tener acceso a ella de manera fácil. Más adelante, te explicaremos los diversos formatos en que esta información puede ser presentada.

Análisis y sistematización de la información


Es muy importante para la investigación documental utilizar técnicas precisas para analizar, sistematizar y representar la información contenida en los documentos (esto como parte fundamental del proceso de construcción de conocimiento), con el propósito de que se pueda citar, transcribir, resumir comentar, confrontar, parafrasear, etcétera. Por esto, resulta necesario elaborar lo que se conoce como fichas de trabajo, en la medida en que se va analizando e interpretando cada documento.

Si las fichas de trabajo se preparan y organizan adecuadamente, será mucho más sencillo concluir la siguiente etapa de investigación, consistente en la integración, redacción y presentación del trabajo de investigación. Según Asti (1968), el objetivo principal de las fichas de trabajo es “la economía del trabajo intelectual y material” (p. 122) y hace énfasis en que son útiles para la sistematización bibliográfica, la ordenación de ideas y el trabajo de síntesis. Los contenidos básicos de las fichas de trabajo, citando a Cázares (1990), son:


Esquema sobre los contenidos básicos de las fichas de trabajo

Contenidos básicos de las fichas de trabajo

Las fichas de trabajo


Las fichas de trabajo pueden variar de nombre y forma, según ciertas necesidades y, de acuerdo con ello, también tienen su propia clasificación. A pesar de que no todos los autores coinciden en ella, proponemos la que nos parece más aceptada entre diversos estudiosos de las técnicas de investigación documental:


Es de uso amplio y en ella se transcribe fielmente el texto que se ha seleccionado de la fuente documental. Es útil cuando se busca expresar exactamente lo que el autor afirmó, sin deformar el sentido de lo escrito.

En este tipo de ficha se sintetizan (o condensan) las ideas que un autor expuso de manera más extensa, sin alterar el sentido o esencia del texto original.

En este tipo de ficha se expresan las ideas que surgen al investigar; si los comentarios provienen del contenido de otra ficha, llevará las mismas referencias y encabezado que ella; si son propios, sólo se alude al punto del esquema de trabajo.

Tiene como finalidad exponer el criterio del investigador, en relación con la información obtenida. Según los mismos investigadores de los que se habló al principio de este apartado, existen cuatro modalidades de ficha mixta:

a. Se copia textualmente un fragmento y se añade un comentario personal (breve).
b. Se copia textualmente un fragmento y se añade un resumen del resto del texto o viceversa.
c. Se mezclan fragmentos de resumen y fragmentos textuales con comentario personal, procurando respetar la idea expuesta por el autor.
d. Se hace un resumen y se añade un comentario.

Sirve para evitar las duplicaciones de información cuando el contenido de una ficha es útil para desarrollar diversas partes del trabajo. Esta ficha de referencia cruzada remite a una ficha de contenido que existe, previamente, con información completa.



De esta forma, se concluye con las técnicas más conocidas de sistematización de información; sin embargo, recuerda que existen otras formas de sistematizar tu trabajo, no dejes de lado el orden y el sistema; por pequeña que te parezca una investigación, esto te llevará a la eficiencia en el tiempo y el esfuerzo invertido en tu trabajo.

Enseguida, se abordará una cuestión de suma importancia para la investigación documental: la dimensión ética, misma que será más fácil de cumplir si, precisamente, llevas un orden y un sistema desde el principio. ¡Sigue leyendo!

Ética de la información (o el plagio académico)


Entendemos por plagio a una forma de copiar ideas (música, palabras, imágenes, planos, gráficos, etcétera.) sin reconocer al autor en una investigación. Cuando se trabaja con fuentes documentales de cualquier tipo, que son fidedignas, confiables y verificables, debemos dar crédito a los autores; esto alude directamente a una ética, respecto a la información que consultamos y citamos, incluida aquélla que obtenemos de Internet.

Según lo explica Isabel Chong (2007), existen tres principios básicos que rigen esta ética: amor a la verdad, honestidad y responsabilidad. La primera se manifiesta por una búsqueda de lo realmente comprobable; la segunda implica la presentación de resultados, en correspondencia con el proceso de investigación, sin distorsionar los datos en beneficio propio o de terceros; y la tercera implica el buen uso de la información.

Según la Asociación Americana de Psicología, la cita textual de un autor no debe contener más de 500 palabras, si se supera este número, se debe pedir permiso al autor.

Ahora bien, ¿cómo reconocemos que una fuente documental es fidedigna, confiable y verificable?


Esquema sobre los elementos para reconocer una fuente documental confiable

Elementos para reconocer una fuente documental confiable



Cómo citar

Existen diversos estilos para citar a un autor, todas ellas basadas en la norma internacional ISO 690:2013, que contiene las directrices generales para la redacción de referencias bibliográficas (es idéntica a la norma ISO 690:2010). Ahora bien, de acuerdo con esta norma, existen distintos estilos: Chicago (CMS), Turabian, MLA, Vancouver (URM), APA, Harvard, AMA, ACS, IEEE, MHRA, CSE-CBE, etcétera. Normalmente, cada disciplina tiene un estilo de cita recomendado, por ejemplo, para ciencias químicas se usa el estilo ACS; para ciencias físicas el estilo AIP; mientras que para biología y ambientales se usa el estilo Harvard; para las humanidades, como la historia del arte, se utiliza el estilo Chicago, y para la psicología el estilo APA.

Usualmente, en México, para los textos de arquitectura, se usa el formato APA. Debes tomar en cuenta que cada tipo de fuente documental se cita de forma distinta, ya sea un libro completo, una revista, un periódico, una enciclopedia, un capítulo de un libro, una página web, etcétera.





Tú puedes acceder a las normas APA directamente en su manual, que se encuentra distribuido en la Web en formato PDF; sólo recuerda buscar la versión más reciente. También te recomendamos buscar acceso a los generadores automáticos de referencias, los cuales facilitan muchísimo el trabajo de citado y generación de bibliografía; en ellos puedes elegir el tipo de fuente y el estilo de citado con que presentarás tu trabajo.



Arquitectura… ¿En dónde buscar información?


La doctora Esther Maya, adscrita a la Facultad de Arquitectura de la UNAM, nos recomienda en su texto Métodos y técnicas de investigación, como fuentes importantes de información para la arquitectura y disciplinas afines, las siguientes:


Esquema sobre las fuentes de información para arquitectura

Fuentes de información para arquitectura



Otros recursos para facilitar tu investigación

Toma en cuenta que existen muchos recursos para hacer más eficiente tu investigación documental; por ejemplo: el uso de subrayados, la toma de notas en una bitácora y la elaboración de mapas conceptuales o esquemas de elaboración propia, a partir de la información obtenida; todas ellas son válidas siempre y cuando no atentes contra la propiedad ajena (como en el caso del subrayado en documentos propiedad de bibliotecas públicas o de terceros), y sean útiles a tu investigación. ¡Hasta pronto!



Actividad. Identifiquemos la investigación documental

A lo largo de este tema se revisó qué es la investigación documental a través de diversas definiciones, clasificaciones básicas, componentes y características. En esta actividad deberás recordar cada uno de estos elementos de la investigación y reflexionar en torno a las características básicas de ésta.


Autoevaluación. Recordando lo fundamental acerca de la investigación documental

A partir del siguiente ejercicio de autoevaluación valorarás tú mismo el cómo asimilaste los conocimientos básicos de la investigación documental, desde su significado, herramientas básicas y la ética de uso general de la información.


Fuentes de información

Básicas

Bibliografía

Baena, G. (1980). Instrumentos de investigación: Manual para elaborar trabajos de investigación y tesis profesionales (4.ª ed.). México: Editores Mexicanos Unidos.

Cázares, L., Christen, M., Jaramillo, E., Villaseñor, L. y Zamudio, L. E. (2004). Técnicas actuales de investigación documental (3.ª ed.). México: Trillas.

Garza, A. (1981). Manual de técnicas de la investigación documental. México: El Colegio de México.

Páez, I. (2006). Estrategias de aprendizaje -investigación documental. Laurus, Revista de Educación (12), 254-266.


Documentos electrónicos

Ávila, L. (2006). Introducción a la metodología de la investigación. [Versión electrónica]. Consultado el 04 junio de 2018 de http://www.eumed.net/libros-gratis/2006c/203/index.htm

Chong, I. (2007). Métodos y técnicas de la investigación documental. [Versión electrónica]. En Investigación y Docencia en Bibliotecología. México: Facultad de Filosofía y Letras. Consultado el 04 de junio de 2018 de http://ru.ffyl.unam.mx/bitstream/handle/10391/4716/12_IDB_2007_I_Chong.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Rojas, I. (2011). Elementos para el diseño de técnicas de investigación: una propuesta de definiciones y procedimientos en la investigación científica. [Versión electrónica]. Tiempo de Educar, 12(24), 277-297. Consultado el 04 de junio de 2018 de http://www.redalyc.org/pdf/311/31121089006.pdf

Complementarias


Bibliografía

Aander, E. (1980). Acerca del conocer y la ciencia. En Técnicas de la investigación social. Buenos Aires: El Cid.

Bunge, M. (1973). La investigación científica. Barcelona: Ariel.

Cázares, L., Christen, M., Jaramillo, E., Villaseñor, L. y Zamudio, L. E. (1984). Técnicas actuales de investigación documental. México: Trillas.

Chalmers, A. (1990). ¿Qué es esa cosa llamada ciencia? México: Siglo XXI.

Corona, C. (1983). Técnicas de investigación documental. México: Siglo Nuevo.

Couture, C. y Rousseau, J. (1988). Los archivos en el siglo XX. México: Archivo General de la Nación.

Eco, U. (1991). Cómo hacer una tesis. México: Gedisa.

Escolar, H. (1990). Historia de las bibliotecas. Madrid: Fundación Germán Sánchez Ruipérez.

Garza, A. (1981). Manual de técnicas de la investigación documental. México: El Colegio de México.

Gómez, F. y Pérez, N. (1984). El diseño de la investigación social. México: Fontamara.

Olaechea, J. (1986). El libro en el ecosistema de la comunicación cultural. Madrid: Fundación Germán Sánchez Ruipérez.

Petru, W. y West, M. (1983). Técnica del bibliotecario. México: Editorial Pax México.

Rojas, R. (1988). El proceso de la investigación científica. México: Trillas.

Rosas, L. y Riveros, H. (1990). Método experimental. En Iniciación al método científico experimental (pp. 53-64). México: Trillas.

Senn, J. (1990). Sistemas de información para la administración. México: Grupo Editorial Iberoamericano.

Tecla, A. (1985). Teoría, métodos, y técnicas de la investigación social. México: Ediciones Taller Abierto.



Documentos electrónicos

Cortés, G. y García, S. G. (2003). Investigación documental. [Versión electrónica]. México: ENBA-DGES-SEP. Consultado el 29 de mayo de 2018 de http://www.enba.sep.gob.mx/GOB/codes/guias/guias%20en%20pdf/investigacion%20documental%20archivo%20y%20biblio/investigacion%20documental.pdf

Secretaría de Marina. (s. f.). Metodología de la Investigación. [Versión electrónica]. México: Autor. Consultado el 29 de mayo de 2018 de https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/133491/METODOLOGIA_DE_INVESTIGACION.pdf

Restrepo, L. (s. f.). La investigación documental. Consultado el 04 de junio de 2018 de http://aprendeenlinea.udea.edu.co/lms/moodle/file.php/658/Glosario_Invest_Documental_final_-_Lina_Rpo.pdf

Cómo citar


Vivero, L. y Sánchez, B. I. (2018). La investigación documental: sus características y algunas herramientas. Unidades de Apoyo para el Aprendizaje. CUAED/Facultad de Arquitectura-UNAM. Consultado el (fecha) de (vínculo)